BIM es un juego tipo playground para dentro de la casa, para niños de 2 a 6 años y pretende estimular sus sentidos para favorecer su desarrollo. Posee elementos que lo desafian a trepar, escalar, gatear y deslizarse, y además posee paneles educativos para que aprendan el clima, los animales, la familia y más.
BIM crece con el niño, ya que sus piezas se pueden agregar o quitar. Poseen distinto nivel de complejidad y ocupan distinto espacio, por lo que se puede armar en base a la disponibilidad espacial de la casa.
BIM cuida el bolsillo de los padres, debido a que primero pueden adquirir el módulo base, y a medida que dispongan de dinero ir ampliando sus prestaciones. Los paneles educativos también se dividen por edades y desafíos.
BIM acerca a padres e hijos, debido a que su fácil montaje permite que el padre lo arme con su hijo.
Y por último, BIM cuida el planeta, ya que la morfología de los módulos permite utilizar la mayor parte de las placas de madera, reduciendo los desperdicios.
